sábado, 22 de octubre de 2011

¡Por fin!


            Por fin parece que la banda terrorista ETA ha comprendido que con la violencia no se llega a ningún sitio y nos ha comunicado al resto de españoles que no piensa llevar a cabo ningún atentado más.
            Me alegro infinitamente aunque sé que esta decisión no es la óptima pues no va acompañada de la entrega de armas y de un reconocimiento expreso de que sus acciones terroristas no han estado bien. También podrían haber añadido una petición de perdón a las víctimas.
            No sabemos tampoco a qué pactos habrán llegado el gobierno y la cúpula de ETA para que ésta haya tomado su decisión. Mucho me temo que las condiciones del fin de la lucha armada sean indignantes para cualquier persona de bien y mucho más para las víctimas. Pero no hay otra salida: o cedemos nosotros en esos puntos o quizá no podremos acabar nunca con ese cáncer que carcome al país. Es radicalmente injusto que personas que han planificado, ejecutado, colaborado en la “lucha armada” obtengan ahora rebajas de penas, escaños parlamentarios... en una palabra impunidad y premios a su comportamiento asesino.
            Las víctimas no estarán de acuerdo. Las comprendo. Todo el dolor que han sufrido por su culpa no se puede eliminar de un plumazo por el simple hecho de que ETA, su verdugo, diga que no va a matar más. No es justo. No lo es. Pero a veces, la justicia ha de pasar a un segundo plano cuando lo que se persigue es que no haya más injusticias. Si conseguimos que no existan más muertes gratuitas, doy por bien empleado que se haya transigido con exigencias que, desde el punto de vista de la equidad, eran implanteables. Al fin y al cabo, el dolor de la víctima no se elimina con el castigo del culpable.
            ¿Qué razones ha tenido ETA para llegar a esta decisión? Supongo que la primordial y mediata ha sido que la mentalidad de las gentes que apoyaban su lucha ha cambiado. En un principio, se justificó en que el franquismo no tenía legitimación democrática. Pero luego siguió igual alegando que, por medios pacíficos, jamás Euskadi alcanzaría la independencia ya que las dos naciones que se lo impiden, Francia y España, utilizarán violencia de Estado para impedirlo. El discurso, ahora, ha cambiado: solo se puede exigir un cambio desde las instituciones democráticas. Entre los presos hace ya tiempo que existía malestar. La razón inmediata hay que buscarla en las próximas elecciones generales. A Bildu le ha ido muy bien en las elecciones autonómicas y quiere aprovechar la oportunidad para presentarse a las generales.  
            No me gustaría que se desmembrara España pero todo antes de que vuelva a repetirse la sangría que padecíamos.
            

2 comentarios:

  1. Discrepo en algunas cuestiones, por ej., ¿ de dónde saca Vd. que hay unos pactos con el Gobierno, y que, de haberlos, contienen condiciones indignantes ?
    No tenemos la menor evidencia de ello, ni prueba alguna. Me parece, como poco, una afirmación arriesgada.
    Claro está, a no ser que demos credibilidad al ala dura del PP y medios afines, que, es evidente, no están muy felices porque Eta deje de matar. No hay más que ver el monumental cabreo que tienen las tertulias de extrema derecha de la TDT, o Pedro Jota R., o la actitud, rayana en la vileza, del PP en la Asamblea de Madrid, al enterarse de la noticia: todos aplaudieron, menos ellos.
    Son los que vienen repitiendo desde el comienzo de la legislatura, que Zp está rendido ante Eta, o que ha traicionado a los muertos; afirmaciones que la tozuda realidad desmiente una y otra vez. Mayor Oreja decía, hace poco, que se estaba haciendo lo que quería Eta. Basta ya de conspiranoias ultra.
    En suma, a la extrema derecha no le viene nada bien la desaparición de Eta, acostumbrados como están a utilizarla políticamente para desgastar al gobierno socialista.
    No les demos ningún crédito, sr. Arnau. NO se merecen que les hagamos el juego, siquiera sea comentando o dando la menor proyección a sus embustes y manipulaciones interesadas.
    Jose LUis.

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  2. Sr. D. José Luis: No se me altere Vd. Es preciso que haya habido conversaciones con el gobierno y que se hayan prometido algunas cosas y, si no, con el tiempo lo iremos viendo si estamos atentos. Si no lo estamos nos pasará desapercibido. Pero es no es sino un mal menor. Ante la posibilidad de que ETA haya dejado de matar, la alegría ha de ser unánime. Me nombra Vd. a una gente que no creo que tenga credibilidad salvo ante ellos mismo (me refiero a las tertulias de ciertas televisiones, que yo no miro ni oigo nunca porque me repelen). En cuanto al PP, lógicamente les habría gustado que ETA hubiera dejado de matar cuando ellos gobernaran, sea cuando fuere, pero eso no es razón para que no se alegren. Si no lo hacen y encima lo demuestran no me parece bien. Pero esto no tiene nada que ver con los pactos a los que se habrán llegado. Estoy convencido porque es lo normal no porque lo diga la derecha.

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